Mi personaje de papel: Valentina Reyes
Personaje: Ifemelu de Americanah, Chimamanda Ngozi Adichie.
IFemelu es una mujer nigeriana joven, cuya historia narrada en la novela Americanah, de Chimamanda Ngozi Adichie me impactó en distintos niveles.
Conocemos a Ifemelu como una migrante en Estados Unidos, que huye de la violencia política de su país; ella es una “americanah”, porque así se les dice despectivamente a los nigerianos que migran a dicho país. A través de ella podemos quizás sentir lo que siente una persona que deja su país, ya que con eso también empieza un proceso de pérdida o de transformación de su identidad, ya que Ifemelu vivirá la experiencia de sentir que su origen se ve y se vive en diferentes formas, en diferentes partes del mundo. Ifemelu enfrenta esta experiencia con fortaleza, buscando su destino, o buscando lo que ella quiere hacer en la vida; es una mujer que quiere tomar las riendas de su vida.
Ifemelu lucha por educarse, y en un minuto está con tan escasos recursos que se tiene que prostituir. Y eso lo encontré super fuerte también. Ifemelu se ve arrojada a esa experiencia de prostitución, porque se ve en una situación muy, muy precaria. Y esto nos muestra que quizá tú en tu tierra lo tienes todo, pero al salir de ella pierdes muchas garantías y quedas en una vulnerabilidad social, económica y familiar.
Ifemelu vive también una historia de amor con un amigo de la juventud, quien la insta a migrar, quien lo hace también con un resultado distinto. Y en un punto ella quiere volver con él, sin embargo está en una relación, y en el fondo cae en una situación de engaño. Entonces, me impactó un poco como a veces los libros hacen que uno empatice mucho con situaciones que, socialmente, pueden ser mal miradas y o juzgadas, y te ponen en el lugar que el personaje no es 100% correcto, sino que va por lo que ese personaje quiere, más allá de los mandatos enseñanzas o lo que manda, lo que dice dictas socialmente a respecto a lo que tenemos que ser.
Desde distintas experiencias vinculadas a la migración, y a la lejanía con aquellas personas que nos vieron crecer, Ifemelu lucha por tener en sus manos su futuro, su destino. Educarse también es una de sus luchas, salir de un lugar que no le acomoda, pero luego vemos que otra lucha de ella es tener el derecho de querer volver a tu lugar de origen, aunque la gente no lo entienda, lo cuestione, siente que ya eres otra persona y que ya no perteneces a ese lugar. Ifemelu se ve en la necesidad de reivindicar que hay un lugar en donde naciste y que sí puedes volver, a pesar de haber estado mucho tiempo afuera.
Ifemelu nos enseña que la migración te cambia. Ella, como “americanah”, ya no es quizá ya no es 100% nigeriana, pero es una nigeriana que ha tenido una experiencia de vida que la transforma.
Creo que eso también es una lucha, como reivindicar su lugar en el mundo tal cual ella es y tal cual ella quiere ser. Creo que eso es parte también del espíritu del libro. Y es una mujer fuerte, es una mujer fuerte, eso por lo menos es lo que me transmitía el libro.
En ese sentido, es interesante la escena con la que se nos presenta a Ifemelu, con lo que parte el libro: en la peluquería, donde trenzan su pelo a la usanza de su país. Una forma de des-occidentalizarle desde lo estético, en las horas previas a su retorno a Nigeria.
Valentina Reyes Ayala (Santiago, 1987). Periodista chilena, reporteando desde 2009 en TVN. Entre los temas que le ha tocado cubrir están las marchas de 2011, algunas carreras presidenciales, el estallido social y la pandemia.